Las fuertes lluvias registradas en las últimas horas debido al paso de la onda tropical número 48 provocaron el desbordamiento de los ríos Manzanares y Tataracual en el estado Sucre, causando inundaciones y pérdida de enseres en dos municipios, aunque afortunadamente no se reportaron víctimas ni personas lesionadas.
El director de Protección Civil, Luis Villalba, informó que el eje carretero Cumaná-Cumanacoa fue uno de los sectores más afectados, donde aproximadamente seis comunidades sufrieron daños menores.
Las familias afectadas se encuentran en alerta y piden la intervención de los organismos del Estado para recibir asistencia.
El pastor Eric Blanco, uno de los afectados, relató que el agua ingresó a las viviendas alrededor de las 5 de la tarde del domingo, 19 de octubre, dejando lodo y barro.
«El río se metió y se inundó la casa. Se mojaron nuestros colchones, prácticamente no tenemos dónde dormir esta noche», expresó Blanco en declaraciones recogidas por medios locales.
En el municipio Montes, el caudal del río Manzanares sigue siendo significativo, mientras las lluvias persisten en la región.
Nayade Solovenly Lockiby, autoridad única de Cumanacoa, realizó un recorrido para evaluar el nivel de los ríos y aseguró que, hasta ese momento, las aguas seguían dentro de su cauce.
La gobernación de Sucre ha ordenado el despliegue de los órganos de protección, rescate, seguridad y defensa para estar preparados ante cualquier eventualidad.
Además, la Escuela «María Teresa del Toro» fue otra de las instituciones afectadas por las inundaciones.
Entre los sectores más golpeados por las lluvias se encuentran Los Dos Ríos, donde el balneario fue el más afectado, así como Amaguto, Aricagua y Los Cedros. La fuerza de las aguas arrastró árboles y levantó el asfalto en varios puntos, dejando tras de sí un panorama de destrucción.